Síndrome de abandono

En este confinamiento no sólo nosotros hemos cambiado sino que ellos también han cambiado….

En este confinamiento no sólo nosotros hemos cambiado sino que ellos también han cambiado….

Nuestro cambio de hábitos, el estar en casa, el dedicarles más tiempo, más cariño, más afecto…. ha hecho que nuestros pequeños compañeros se sientan más queridos y atendidos que de costumbre.

Quienes tenemos animales de compañía, lo sentimos. Sentimos que ellos nos escuchan y entienden… Que ellos aprecian muchas cosas, que al ser contadas a las personas que no tienen animales de compañía, piensan que hemos perdido la cabeza.

Seguro que habrás notado cambios en ellos, quizás una actitud más cercana de la que solían tener, unos comportamientos distintos…. Parece que ahora se encuentran más vivos que nunca. Y es porque nos sienten más cerca.

Pero ahora que volvemos a retomar las actividades, que algunos van al ya al espacio de trabajo a realizar su jornada, ellos se sienten tristes.

Los que tenemos mascotas, vamos observando con pena, cómo este cambio les va afectando a ellos.

Los animales, suelen acostumbrarse a esa soledad de la que disfrutan mientras estamos fuera de casa y en el caso de los felinos, que son bastante independientes, se adueñan de la casa. Pero este confinamiento ha hecho que los animales nos hayan visto con extrañeza, pasear todo el día por casa, haciendo no sólo se hayan acostumbrado a este cambio, sino que han disfrutado este estado de compañía.

Pero ahora vuelven a estar largo rato sólo y tienen que volver a acostumbrarse. Nos produce pena dejarlos cuando nos marchamos a trabajar, pero deberán ir adaptándose de nuevo a esta soledad.

Hay personas que precisamente, por tener durante el periodo de confinamiento tiempo para disfrutar el hogar, decidió compartirlo acogiendo a alguna mascota, siendo algo recíproco, la persona disfrutaba de su mascota y la mascota disfrutaba de esa persona y de un hogar.

El síndrome del abandono no es algo que solo afecte a los humanos…. La ansiedad por separación ocurre en niños, pero los animales de compañía también la sufren

Ahora que se han acostumbrado a tenernos en casa, existe una gran probabilidad de que sientan este abandono.

En ellos se empiezan a dar cambios en su conducta cuando se encuentran solos en casa: puede aparecer ladridos continuados, micciones o defecaciones en casa, lloriqueos, salivación, o incluso pueden llegar a agredirse.

También pueden manifestar su tristeza y abandono dejando de comer..

Aunque este síndrome es más común en animales jóvenes, debido a la situación actual que nos encontramos, puede darse también en los adultos. Ya que se han acostumbrado a que los dueños estén en casa y ellos viven la marcha como una abandono.

Para poder ayudarles en estos momentos a que no sufran tanto es importante llevar a cabo una serie de actos que les ayuden a entender…

  • Al irte de casa intenta no hacerle demasiados mismos, sino creerá que te lo llevas con él.
  • Intenta asociar tu marcha con algo positivo para él. Como puede ser darle un juguete o algo que le dure tiempo…. Y pueda distraerlo. Cuando regreses retíralo así se queda anclada esa asociación.
  • Si lo ves nervioso a tu regreso, es importante que le des un tiempo a calmarse, y que lo acaricies y le hagas mimos, cuando esté tranquilo para que aprenda a asociar el afecto a la tranquilidad. Si llegas y ves algún desperfecto no lo regañes, ya que no comprenderá por qué lo haces. No establecerá la asociación adecuada entre lo que ha hecho y el castigo.
  • Haz mucha actividad física con él juega o dale largos paseos para que baje su ansiedad.

No es fácil, para ellos pero tampoco para nosotros. Cuando sales y los ves con esa carita y ese llanto…. Se complica la marcha. Pero es importante para ellos y para nosotros establecer relaciones fuertes y saludables para que ninguno de los dos sufra…

También hay personas que ahora por no disponer de tiempo se plantean la idea de abandonar al compañero… Desde aquí os pedimos conciencia, y responsabilidad. Ellos han estado acompañándonos durante todo este tiempo, no los dejemos ahora abandonados…

Escrito por : Cristina Ballenilla Reina: Psicóloga del Parque Cementerio de Málaga. Parcemasa.
Con la Colaboración de Lidia Torres

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Últimas entradas

Entradas Anteriores

Últimos comentarios